Un Poeta Diletante

Tengo una herida que cala devastando el alma. Fue un cristal partido en dos.... Se retirará una pieza y otra quedará en el corazón. Una dejará un abismo y serán cascadas la sangre que emane. La otra será un solo filo incrustado y flojo en el aire. Quisiera sacar las dos y desangrado tenderme al suelo. El cristal que ahora hiere era antes un espejo. Entre la honra del hombre y los principios del amor. Una marca el porte y la otra el corazón. Son tiempos de muerte la cangrena recorre el romance. Es triste tenerle a quien fue poema y fue arte. Queda clavado entonces un mapa de intenciones y promesas. Ha caído uno de los cristales por amar en doble forma a la herida. Ha caído por ser noble Y a caído por ser vida. Ha caído por no ser quién ensanche la boca y la cabida. Ha caído por saber que podría entrar ya sin salida. Pero entre más se acerque una al corazón más será desplazada la otra astilla. Y entre más empuje una más abrirá esa salida. Entonces se frena el pulso y las venas de sangre se vacían. Ya no hay nada en el cuerpo queda en los ojos una agonía.

Perdería la compostura ésta noche de pensar que traes el corazón herido. Y conociendo el poco derecho que tengo de abordar el tema,... me atrevo a escribir una pizca de lo que llevo adentro. Pues jodidamente te traigo a ti desde hace unos días, y contigo viene intrínseco el deseo de escribir. ¿Pero qué puedo atreverme a escribir si traes el corazón partido? Entre las manos agrietadas y los ojos húmedos, sin techo, ni pestañas, y sin consuelo inmediato. Te quedas con ramas en las manos y un anillo que significa toda una historia. Con un contrato de miradas que destruye el orden de los desayunos repetidos. Entonces descubres que la única representación de amor es el arte, algo más que dos cuerpos en una escena, y menos que una cena con Champagne. Algo igual a la libertad de la soledad, y menos que la desesperanza del olvido, más que nada y menos que todo. Algo así como tu y yo.

Estamos listos para los nuevos cambios

"Absoluta" Me produces un deseo perfecto, idealizable.... Desde tu nariz hasta tus pasos. Tus ojos son un canto, un deseo callado, un deseo silencioso, traducido entre tus labios. Se describe en tu cuello este placer conticinio, el derriere cae en tu espalda, pide a mi mano dominio. La cascada acuciante de tu sexo hecho mares, con el final de un risco, y mis dedos delirantes. Tu acomodo es suntuoso, su paisaje hecho pintura, una obra tan profunda sin un marco. No limita. Eres luz pura que camina, eres la poesía del pragma, eres catarsis y portento, eres cuerpo y eres alma. Del punto del encuentro, del cielo y de la flama, de tu Venus a tu pecho, cada noche una mangata. Seré yo el sempiterno que lo cruce a caminata, cada que lo pida el cuerpo o cada que lo exija el alma.