Ministerio :Amigos de JESUS

Oración de la Noche Señor, te alabo y te bendigo en esta noche en la que me dispongo a descansar. Te doy gracias porque sé que en este momento que necesito... de Ti, vuelves a mostrarme que tu amor hacia mí es verdaderamente infinito, que no te mides para hacerme sentir lo valioso que soy para Ti. Quiero desprenderme de todo lo que me quita la Paz, para que mi corazón esté tranquilo, y así pueda descansar serenamente, confiando en que me cuidas y proteges mi sueño velando a mi lado. Derrama tu Espíritu Santo sobre mí y hazme sentir sereno y tranquilo, que tu paz recorra todo mi ser dejándome libre y haciéndome descansar verdaderamente. Estoy seguro de que si sigo firme en mi oración, no tardará la Paz en albergar mi corazón. Gracias por hacerme sentir que puedo venir hasta Ti y encontrar una respuesta, que estás dispuesto a bendecirme sin medidas. Dame valentía para seguir viviendo con ganas de salir adelante, con ganas de ser un vencedor y de atender tu llamado a la felicidad plena, esa que viene de Ti. Te entrego cada sueño y proyecto, regálame la fuerza que necesito para poder alcanzarlos. Sé que eres un Dios bueno que me apoya y me ayuda a salir adelante y ser mejor cada día. Amén . Martes, 25 de Mayo de 2021 . "Bendigan, pueblos, a nuestro Dios, hagan oír bien alto su alabanza: Él nos concedió la vida y no dejó que vacilaran nuestros pies." Salmos, 66 See more

Bendecido Domingo del señor para todos!!!. Secuencia de Pentecostés Ven, Espíritu divino, manda tu luz desde el cielo.... Padre amoroso del pobre; don, en tus dones espléndido; luz que penetra las almas; fuente del mayor consuelo. Ven, dulce huésped del alma, descanso de nuestro esfuerzo, tregua en el duro trabajo, brisa en las horas de fuego, gozo que enjuga las lágrimas y reconforta en los duelos. Entra hasta el fondo del alma, divina luz, y enriquécenos. Mira el vacío del hombre, si tú le faltas por dentro; mira el poder del pecado, cuando no envías tu aliento. Riega la tierra en sequia, sana el corazón enfermo, lava las manchas, infunde calor de vida en el hielo, doma el espíritu indómito, guía al que tuerce el sendero. Reparte tus siete dones, según la fe de tus siervos; por tu bondad y tu gracia, dale al esfuerzo su mérito; salva al que busca salvarse y danos tu gozo eterno.

5 Día de la Novena al Espíritu Santo - Tema Poder de Dios

Carlos Omar _- DECIENDE. -----> https://youtu.be/2ueA9wQVk9g

¿Qué es la Epíclesis? ¿Habías escuchado esta palabra? Cada que asistimos a la Santa Misa, el Sacerdote realiza diferentes acciones que encierran un gran signif...icado y que muchas veces desconocemos. Por ello, hoy queremos hablar sobre la Epíclesis. La Epíclesis es la invocación que hace el sacerdote al Espíritu Santo durante la Misa. Es una invocación por la que se implora la fuerza del Espíritu Santo para que los dones ofrecidos se conviertan en el Cuerpo y en la Sangre de Cristo, y para que la víctima inmaculada que se va a recibir en la Comunión sirva para la salvación de quienes van a participar en ella (IGMR 179). Cuando el sacerdote hace esta oración, usualmente se hace repicar una campanilla; anunciando el momento de la consagración del Pan y del Vino, mientras los feligreses se arrodillan. Pero, ¿qué es lo que pasa realmente? Sucede que el Espíritu de Cristo vivo toma el lugar de la hostia y del vino y se hace Presente Realmente como materia. NO es un símbolo ni tampoco una representación. Es el momento más sagrado en que Jesús cumple su palabra de darnos ese alimento que nutre nuestro espíritu. Se trata de un gran milagro que el Señor concede a sus hijos y que debemos valorar con mayor fe en la medida que tomemos conciencia de la realidad de su Presencia Real en la Eucaristía. Cuando el sacerdote levanta la hostia y el vino, y nos presenta el Cuerpo y la Sangre de Cristo, no conviene agachar la cabeza. Más bien, conviene levantar la cabeza y mirar al Señor que está frente a todos para adorarlo, porque está ahí enfrente; conviene rogarle, porque está verdaderamente presente. Así pues, hemos de contemplarle porque Él vino a vernos y toca la puerta de nuestro corazón. Abrámosle y dejémosle entrar en comunión con cada uno de nosotros. Ahí es donde verdaderamente entra en nuestro corazón, Jesús Eucaristía.