1. Home /
  2. Religious organisation /
  3. Jesús Salva Y Sana

Etiquetas / Categorías / Temas



Jesús Salva Y Sana 22.11.2022

¿El enojo está afectando tu vida? El primer paso para poder manejar (darle la dirección, expresión e intensidad adecuadas) o eliminar el coraje, es reconocer q...ué tan frecuentemente nos enojamos. ¿Qué tanto te enojas? ¿Lo reconoces y aceptas? Califica tu enojo. El primer paso para poder manejar (darle la dirección, expresión e intensidad adecuadas) o eliminar el coraje, es reconocer qué tan frecuentemente nos enojamos. Cuando el enojo o coraje es parte de nuestra vida diaria, podemos dejar de percibirlo o de darle la importancia que realmente tiene. Contesta el siguiente cuestionario, con la mayor objetividad posible y sin pensar mucho las respuestas. Qué tan frecuentemente te sientes: 1. Tenso. 2. Irritado o molesto por la conducta de los demás. 3. Demasiado inquieto para poder dormir. 4. Frustrado. 5. De mal humor. Piensas que: 1. ¿La gente trata de aprovecharse de ti? 2. ¿Algunas personas tratan de manipularte o de demostrar su superioridad? 3. ¿No obtienes los resultados que deberías de obtener? 4. ¿Das mucho más de lo que recibes? 5. ¿Te esfuerzas más y recibes menos que los demás? 6. ¿No te reconocen lo que vales o lo que haces? 7. ¿La vida, el mundo, las personas, etc., son injustos? 8. ¿Es importante que te desquites de lo que te hicieron? 9. ¿La mayor parte de la gente es irresponsable o floja? 10. ¿Los demás no actúan como se debe de actuar? 11. ¿Las cosas no están saliendo como deberían de salir? 12. ¿La única manera de lograr tus objetivos es demostrar quién es el que manda? 13. ¿Si no te impones, la gente no obedece o deja de cumplir con sus obligaciones? 14. ¿Tú cargas con la mayor parte de las responsabilidades? 15. ¿Te es difícil olvidar cuando alguien te causó un daño o problema? 16. ¿La gente es muy lenta? 17. ¿Las personas con las que vives, trabajas o te relacionas, deberían de ser o de actuar de manera diferente 18. ¿No cuentas con la ayuda de los demás? 19. ¿La gente te estorba o trata de impedir que tengas éxito en lo que necesitas hacer? 20. ¿Los demás no se dan cuenta de la importancia de las cosas? Cuando estás molesto: 1. ¿Te piden que no grites? 2. ¿Te arrepientes de lo que dijiste o hiciste? 3. ¿Desquitas tu malestar con otras personas? 4. ¿Fumas, bebes, tomas tranquilizantes, drogas, etc., para calmarte? 5. ¿La gente te pide que te calmes? El enojo está relacionado con tres aspectos: 1. Lo que sentimos. 2. Lo que pensamos de lo que está sucediendo, de otras personas y/o de nosotros mismos. 3. La conducta que resulta de los dos anteriores. Gritar es una conducta, pero también lo es mantenerse callado y disimular nuestro coraje. El cuestionario toma en cuenta los tres aspectos. Si contestaste "si" a la mayoría o a una gran parte de las preguntas, significa que te enojas o molestas con frecuencia. Si enojarse es ya un hábito en ti, quizás no te has dado cuenta de qué tan importante es que aprendas a manejarlo. Problemas relacionados con el enojo. El enojo mal manejado puede ser muy destructivo, daña tus relaciones y tu salud. Aprende a manejarlo. ¿El coraje te hace perder el control? Aprende a manejarlo. ¿Es el enojo tu principal enemigo? Todos sabemos lo que es el enojo, porque todos lo hemos sentido. El enojo es una emoción como cualquier otra. Tiene aspectos positivos, (nos da la energía necesaria para defendernos) y aspectos negativos (puede ser muy destructivo para nuestras relaciones y para nuestra salud), pero no es malo o bueno en sí mismo. Lo que debemos analizar y calificar, es nuestra manera de manejarlo, controlarlo y expresarlo. El coraje se convierte en un problema cuando: Nos hace perder el control, nos impide analizar una situación y tomar las decisiones correctas, se vuelve un sentimiento constante en nuestras vidas, lo reprimimos constantemente, afectando nuestra salud y dejando los problemas sin resolver, lo expresamos de manera destructiva, nos provoca sentimientos de incapacidad, lo que puede llevarnos a la depresión, lo utilizamos para sentirnos fuertes o poderosos, a costa de humillar a los demás, lo necesitamos para poder actuar, no nos damos cuenta de su frecuencia o intensidad, sentimos que lo necesitamos para "protegernos", es la única manera en la que nos podemos relacionar con los demás. El coraje puede ser difícil de manejar, porque no siempre podemos detectar cuando se está iniciando y puede aumentar muy rápidamente su intensidad. Además, a corto plazo, puede parecer que nos proporciona buenos resultados. Pero a la larga nos impide tener buenas relaciones, afecta de manera importante nuestra salud y nos mantiene atrapados en ciertas situaciones o con algunas personas. Por eso es importante detectar: Qué situaciones o elementos lo inician, qué tipo de pensamientos lo mantienen o incrementan y que mitos nos impiden o dificultan aprender a disminuirlo, eliminarlo o utilizarlo y expresarlo adecuadamente Causas y consecuencias del enojo. Conocer las causas y consecuencias del enojo, nos ayuda a controlarlo y a solucionar los problemas que nos causa. ¿Sabes por qué te enojas? ¿Cuántas veces tú y tus amigos o familiares, viven la misma situación y reaccionan de manera diferente? ¿Te enojas en ciertas ocasiones, cuando otros se mantienen tranquilos? Todos creemos que nos enojamos por lo que nos pasa o por lo que la gente nos hace o dice. Esto es sólo, parcialmente cierto. Veamos un ejemplo: Imagínate que estás parado en una fila, para entrar a algún lugar. De repente una persona te pisa y escuchas que te dice perdón, fue sin querer. Lo más probable es que no le des mucha importancia. ¿Pero qué sucedería si esto se repite varias veces? ¿Cómo crees que te sentirías? Seguro que, después de cierta cantidad de pisotones, te enojarías. ¿O no? Ahora imagínate que lo ves a la cara para reclamarle y te das cuenta de que está ciego. ¿Crees que tu coraje se mantendría en el mismo nivel? Estoy segura de que no. Muy probablemente tu enojo disminuiría o se acabaría. ¿Pero por qué, si los pisotones los recibiste? Porque tus pensamientos seguramente cambiaron. En lugar de pensar: "Qué se cree este ..." Pensaste: "Pobre, no ve..." El hecho de haber sido pisado no cambió, pero tus pensamientos sí. Calificaste la situación y a la persona de una manera diferente y tu coraje disminuyó. El enojo, como muchas otras emociones, puede: Desencadenarse automáticamente, brotar sin que nos demos cuenta del momento en que se inicia, surgir sin que conozcamos la causa real que lo provoca. Sin embargo, son nuestros pensamientos los que lo aumentan, mantienen o disminuyen. Los disparadores del enojo. Podemos enojarnos cuando nos sentimos: Atacados o lastimados, física y/o emocionalmente, ignorados, rechazados o excluidos, engañados, acusados injustamente o avergonzados, frustrados ante una pérdida o ante la imposibilidad de lograr lo que deseamos, inferiores o devaluados. Pero el coraje aumenta o se prolonga cuando pensamos que: Algo es injusto, las cosas y las personas deberían de ser diferentes, las personas tienen que actuar como nosotros queremos o pensamos que es lo correcto, alguna persona se siente superior a nosotros, alguien quiere aprovecharse de nosotros. si nos enojamos, conseguimos lo que queremos, si atacamos primero, evitamos ser atacados, Con frecuencia, utilizamos el enojo para: Evitar establecer relaciones cercanas, por no saber relacionarnos o por tener miedo de ser lastimado. sentirnos fuertes o capaces y enmascarar así, un sentimiento de inseguridad o autoestima baja (como cuando tenemos una autoestima inflada). Nos enojamos con facilidad cuando no aprendimos a: Controlar nuestros impulsos, pensar antes de actuar, tolerar la frustración, manejar de otra manera la angustia o el miedo, reconocer que el enojo puede ser síntoma de depresión. Consecuencias del enojo. Las consecuencias del enojo pueden abarcar todas las áreas de nuestra vida. Es indispensable aprender a manejar el enojo, ya que los resultados de manejar inadecuadamente el coraje son: A nivel físico, sufrimos un desgaste importante. Cuando nos enojamos, nuestro organismo produce una mayor cantidad de sustancias químicas, entre ellas la adrenalina, que alteran el funcionamiento normal de nuestro cuerpo. Esta alteración afecta nuestro sistema inmunológico, puede provocar contracturas y dolores musculares o de cabeza y nos hace más vulnerables a algunas enfermedades, como gastritis, colitis, dermatitis, etc. A nivel familiar o social, nuestras relaciones se alteran o pueden terminarse. Cuando estamos enojados, podemos lastimar física o emocionalmente, a los demás, dando como resultado resentimiento, deseos de venganza o alejamiento. Cuando no podemos manejar adecuadamente el coraje, podemos desquitarnos con otras personas, aumentando así, nuestros problemas. A nivel emocional: Cuando sentimos que otras personas nos hacen enojar (o nos ponen tristes, tensos, etc.), les estamos dando todo el control de la situación, aumentando así nuestra sensación de incapacidad y de coraje. Nuestra respuesta puede provocarnos sentimientos de vergüenza o culpa, prolongando nuestro malestar. En el aspecto personal, nos enfocamos tanto en nuestro enojo y en la causa del mismo, que: Dejamos de disfrutar otras situaciones o relaciones, nos es difícil analizar objetivamente la situación y encontrar soluciones adecuadas, afecta nuestro desempeño en cualquier situación. Para manejar el coraje, haz una lista de las personas que te hacen enojar y otra de las situaciones en las que te molestas o enojas con mayor facilidad. Revisa los disparadores del enojo y ve cuáles son tus sentimientos y/o pensamientos en relación a cada una de dichas personas y situaciones. Es mejor si lo haces por escrito. ¿Qué elementos (pensamientos o sentimientos) comunes encontraste? Si esa lista no fuera tuya, sino de otra persona, ¿qué conclusión podrías sacar? Revisa nuevamente tus listas y observa si, en cada situación o con cada persona, tu enojo te proporciona algún beneficio. Si te ayuda a obtener lo que quieres, si te protege o te hace sentir fuerte. Pero piensa, que hay formas mucho más adecuadas y menos desgastantes, de lograr tus objetivos. En ocasiones nos cuesta trabajo reconocer nuestro enojo o su nivel, porque puede ser parte de nuestra forma de ser o porque creemos que es una respuesta lógica y natural ante la vida tan estresada que tenemos. Sin embargo, recuerda que el enojo daña tu salud, tus relaciones e impide que rindas en toda tu capacidad. Cómo manejar el enojo. Cuando el enojo y la rabia nos dominan, podemos perder el control y ser muy agresivos o cometer actos de violencia. Por eso es tan importante aprender a manejar el coraje y evitar las consecuencias físicas y emocionales que aumentan nuestros problemas y nuestro sufrimiento. El enojo puede ser muy destructivo. Controla el enojo, para que no te controle. El enojo es una de más emociones más frecuentes en nuestra vida. Pero también es una de las más desgastantes y es la causa de una gran parte de nuestros problemas, ya que: Nos desgasta físicamente, porque altera todo el funcionamiento del cuerpo. Influye en la toma de malas decisiones, que afectan todas las áreas de nuestra vida. Aumenta o provoca conflictos con los demás. Pero el coraje en sí mismo, no es malo. Es una respuesta instintiva de nuestro organismo, que nos da la energía necesaria para defendernos cuando somos atacados físicamente o cuando nuestra vida está en peligro. Nos puede servir para reconocer que algo nos está molestando y motivarnos a actuar. El problema no es sentir coraje o rabia, cuando el sentimiento es momentáneo o está bien encausado y manejado. EL verdadero problema surge cuando mantenemos ese sentimiento durante muchas horas, días, meses o años y cuando, gracias a él, respondemos desproporcionadamente. Las causas del coraje pueden ser: Internas, a partir de algunos recuerdos o externas, relacionadas con lo que sucede a nuestro alrededor. Podemos hablar de dos tipos de coraje: El que dirigimos hacia nosotros mismos, en el que: Nos atacamos, insultamos, devaluamos, o reprimimos, con lo que se convierte en depresión. El que dirigimos hacia los demás. El coraje puede ser utilizado de una manera adecuada y de una inadecuada. 1. Es inadecuada, cuando. Explotamos, sin medir las consecuencias. El coraje nos controla y podemos lastimar emocional o físicamente a una persona. Lo utilizamos para poder controlar a los demás. Esto puede darse en personas con baja autoestima, que lo utilizan para sentirse fuertes y poderosas. Lo reprimimos, porque pensamos que es algo negativo. Esta actitud abarca desde negarlo, decir que no estamos enojados, hasta dejar de sentirlo, aparentemente. 2. Adecuada. Dado que cada persona es diferente, cada uno de nosotros puede manejar adecuadamente el coraje, de una manera distinta. Algunos, simplemente con reconocer y expresar que están enojados, se sienten mucho mejor y el coraje disminuye, permitiéndoles resolver la causa de su malestar. Otros necesitan descargar la energía físicamente, con actividades como correr, encerrarse en un cuarto y gritar, golpear un cojín, etc. Esto es adecuado siempre y cuando tus acciones no te afecten de alguna manera o afecten a los demás y que no hagas cosas de las que luego te arrepientas. También podemos: Hablar y aclarar las cosas con las personas involucradas, si lo hacemos e una manera asertiva. Hacer ejercicio. Relajarnos Expresarlo a través del arte: pintura, escritura, música, etc. ¿Qué es lo que dispara el coraje? El enojo tiene que ver con dos aspectos: 1. El temor o la sensación de estar amenazado, ya sea real o simbólicamente. Esta amenaza puede ser en el aspecto físico, emocional, psicológico o espiritual. 2. La frustración de no obtener lo que deseo o de que las cosas y las personas sean diferentes de cómo yo quiero que sean. Cuando percibimos esa oposición de la gente como agresiva, el coraje o la ira pueden crecer desproporcionadamente. Este aspecto está relacionado con una necesidad de control, ya sea físico o psicológico y muy frecuentemente lo justificamos, equivocadamente, con el concepto de "lo que es justo". Nuestra percepción y pensamientos son los elementos que disparan y mantienen el coraje. Por ejemplo: Mi ex-pareja me grita. Yo lo percibo como agresión y me enojo, porque pienso: "No debería de gritarme (debería comportarse como yo quiero que se comporte)". "Se cree más que yo"(mi autoestima se siente amenazada). "Todo lo hace a propósito para hacerme sentir mal" (y no debería hacerlo). Etc. Estos pensamientos me generan más coraje y la rabia se va a mantener mientras los tenga. Si dentro de 5 días, estoy tranquila viendo televisión y me acuerdo y vuelvo a tener ese tipo de pensamientos, me vuelvo a enojar, aunque no esté mi ex-pareja presente. Lo malo es que así como pueden ser 5 días, pueden ser 5 o 50 años. Cada vez que yo tenga este tipo de pensamientos o similares, vuelvo a sentir el coraje con la misma intensidad o mayor que cuando fue la discusión. (También podría no haberle hecho caso, percibirlo como una conducta que no tiene importancia para mí y no enojarme.) (O pensar: "Pobre, sólo gritando puede sentirse mejor, lástima" y tampoco me enojo). Lo más probable es que, si me enojo, le grite o insulte y mi pareja reaccione con pensamientos parecidos a los que causaron mi enojo, formando un círculo vicioso en donde el coraje de uno aumenta el del otro, indefinidamente. Cuando nos estamos divorciando, todo el coraje que sentimos y que puede provocar un fuerte deseo de desquitarnos o vengarnos, tiende a mostrarse en la negociación de los aspectos económicos y relacionados con los niños. ¿El resultado? Los trámites se alargan, nosotros nos desgastamos física y emocionalmente y nuestros hijos sufren. ¿Qué hacer? Describe las situaciones en las que te enojas y responde a las siguientes preguntas, por escrito: ¿Por qué me enoje? ¿Por qué creo que eso pasó? ¿Que hizo la otra persona? ¿Por qué creo que lo hizo? ¿Por qué creo que lo hizo para molestarme? ¿Qué pienso de esa persona? ¿Qué pienso de mí? Escribe todo lo que se te ocurra, sin analizarlo. Si crees que no pensaste nada, escribe qué crees que pensaría cualquier persona que se encontrara en tú lugar. Muy probablemente esos son tus pensamientos. Una vez que hayas terminado, revisa cada pensamiento y pregúntate: Si pienso así ¿cómo me siento? Imprime los artículos sobre estilos de pensamiento y cómo cambiar los pensamientos equivocados para que analices y trabajes con cada uno de los pensamientos que te generan coraje. Poco a poco vas a poder identificar el tipo de pensamiento que te hace enojar o que te causa sufrimiento y vas a poder cambiarlo o eliminarlo. Date el tiempo que necesitas, para dominar esta técnica. Recuerda que cada persona es diferente. Pero recuerda también, que sólo aprendemos algo, cuando lo practicamos todas las veces que sea necesario.

Jesús Salva Y Sana 21.11.2022

Técnicas para manejar el coraje. El coraje puede ser muy destructivo. Nos afecta físicamente y aumenta nuestros problemas. Aprende a manejar tu enojo, para que... no te maneje él a ti. Aquí encontrarás las técnicas adecuadas. ¿Haz pensado en el daño que te causa el enojo? Contrólalo. Esta sección te ayuda a: 1.- Detectar la causa de tu enojo. 2.- Decidir tu respuesta. 3.- Saber qué hacer. ¿Por que te enojas? El primer paso para manejar el enojo, es reconocerlo y aceptar que estamos enojados, ya que con frecuencia, negamos nuestro coraje (y otras emociones) o lo suprimimos. Reconocer el enojo significa, aceptar que algo está sucediendo en mi vida, que me molesta o irrita, pero que no lo he podido manejar. El segundo paso es analizar lo que está sucediendo, para encontrar la causa real del enojo. Con frecuencia, si no resolvemos una situación que nos da coraje, fácilmente podemos explotar ante otra persona, por algo sin importancia y creer que, lo que ella hizo, es la causa real de mi enojo. Cuando te enojes ante una situación o persona, pregúntate: 1. ¿Qué es, exactamente, lo que me enoja? 2. ¿Por qué me enoja? 3. ¿Qué pienso de esa persona o situación? 4. ¿Qué está pasando en mi vida o qué acaba de suceder, que me hace más sensible, irritable o intolerante? 5. ¿Estoy tenso, cansado o preocupado? Si te enojas con frecuencia, analiza: Cómo manejaban tus padres o familiares cercanos el coraje, porque posiblemente aprendiste el mismo modelo. ¿Qué situaciones de tu pasado, pueden estar influyendo en tu reacción actual? El dolor o coraje que no pudimos o supimos resolver en el pasado, puede influir en nuestras reacciones del presente. ¿Cuáles son los mitos en los que te apoyas, para justificar tu enojo? ¿Estás deprimido, preocupado, asustado o te sientes culpable por algún motivo? Con frecuencia el enojo es la manifestación de otras emociones. Si analizas con cuidado y objetivamente tus respuestas, podrás tener una imagen, mucho más clara y específica, de lo que te sucede y te será mucho más fácil resolver la situación y manejar tu enojo. ¿Qué quieres hacer al respecto? ¿Quieres sentirte bien momentáneamente o quieres solucionar el problema y manejar tu enojo, aunque te cueste más trabajo? Si gritas, insultas y/o golpeas, puedes sentirte bien de momento, pero a la larga, tus problemas aumentan. Si quieres buscar una solución, cálmate antes de tomar cualquier decisión. Para lograrlo, aprende a respirar, a relajarte, haz ejercicio, analiza y cambia tu manera de pensar, etc. Cuando disminuyes tu coraje, puedes analizar con mayor objetividad, tanto lo que sucedió, como la manera de solucionarlo. Si estás calmado, puedes hablar con la otra persona, en lugar de discutir o pelearte con ella. Si la atacas, se va a poner a la defensiva y posiblemente te ataque re regreso y el enojo de ambos aumenta. ¿Qué hacer? 1. Recuerda, que no nos enojamos con los demás, porque actúan de determinada manera. Nos enojamos, porque no hacen lo que nosotros queremos. No les "exijas" a los demás que piensen, sientan o se comporten como tú. ¿Por qué tienen que actuar como tú quieres? ¿Tú haces todo lo que quieren las personas con las que te relacionas? Seguramente no. ¿Entonces, por qué quieres que ellas lo hagan? Ten en cuenta que cada persona piensa diferente y ha tenido distintas experiencias en la vida, por lo tanto, lo que para ti es correcto o adecuado, puede no serlo para otros. Aprende a respetar las diferencias. 2. Descubre qué es lo que estás pensando, sobre la persona o situación que te hace enojar. Recuerda que, independientemente de lo que sucede, nuestros pensamientos mantienen y aumentan nuestro coraje. Por eso no todos nos enojamos ante la misma situación. Porque cada quién la percibe y califica de diferente forma. Todos los pensamientos que incluyen la palabra "debería", "no debería" o "tiene que", nos producen coraje. Elimínalos de tu vocabulario. Una cosa es que prefieras ciertas conductas o características y otra que la gente "deba" de ser o actuar así. 3. Rompe el ciclo de la agresión lo antes posible. El ciclo de la agresión esta formado por tres niveles: Intensificación, explosión y postexplosión. En el primer nivel se dan las primeras señales del enojo, acompañadas generalmente por una serie de pensamientos, que lo alimenta y lo hacen crecer y crecer. Si crece demasiado y cada persona tiene su propio límite, se descarga el coraje de manera explosiva o descontrolada, dando como resultado una agresión física o verbal. Este es el segundo nivel. El último nivel es el de las consecuencias negativas, que resultan de la agresión física o verbal, desplegada durante la fase de explosión. Consecuencias que, además de causarnos mayores problemas, nos deja "rumiando" el coraje, por lo que fácilmente volvemos a iniciar el mismo proceso. Tips para manejar el enojo. Aprende diferentes tips para manejar el enojo y utilízalos de acuerdo a la situación que estás viviendo. No permitas que el coraje te domine y destruya tus relaciones. ¿Sabes cómo actuar, cuando estás enojado? 1.- Acepta las cosas que no puedes cambiar. Hay muchas cosas que, a pesar de que nos lastiman o molestan, no podemos hacer nada al respecto. Ya sea porque no tienen solución o porque ésta no depende de nosotros. Sólo podemos cambiarnos a nosotros mismos y sólo en ciertos aspectos. Nosotros nunca vamos a poder cambiar a otra persona, por mucho que la presionemos, si ella no quiere o puede hacerlo. En ocasiones vivimos experiencias que nos hacen sufrir o nos enojan y no tenemos ningún control sobre ellas. Enojarnos porque son injustas, porque no deberían de ser, etc., sólo aumenta nuestro dolor y coraje. Por lo tanto, lo mejor es aceptarlas, es decir, reconocer que así son, que se están dando. Esto no quiere decir resignarnos, sin hacer nada. Al contrario, al aceptarlas, podemos ver que opciones tenemos. Si no podemos cambiar la situación que estamos viviendo, podemos alejarnos de ella o cambiar nuestra actitud y forma de pensar. 2.- Evita ser un eslabón en la cadena de agresión y enojo. Con frecuencia el enojo no manejado y no expresado adecuadamente, a la persona que nos lo provocó, lo descargamos en otras personas y estas pueden hacer lo mismo, dándose una cadena sin fin. Por ejemplo, el jefe regaña al empleado, éste se desquita con su esposa, ella con los niños, ellos con el hijo de su vecino que va llorando con su mamá, ésta se enoja y Y así sucesivamente la cadena puede alargarse al infinito. ¿Cómo romperla? Cuando se desquitan contigo, aunque sepas que es injusto, no discutas en ese momento. Después, elige el momento adecuado y habla las cosas, utilizando técnicas adecuadas de comunicación. Cuando tú estés enojada, analiza bien las causas y busca resolver los problemas con la persona adecuada. Utiliza las técnicas adecuadas para relajarte y tranquilizarte y si es necesario, comenta con la gente con la que estás en esos momentos, que estás enojada y/o de mal humor, pero que no es con ellos. 3.- Date un "tiempo fuera". No podemos dejar los problemas sin resolver, ni el enojo sin manejar, porque siguen surgiendo una y otra vez, creando nuevas dificultades. Por eso es importante hablar y aclarar las cosas con la persona involucrada. Sin embargo, si estás muy enojado, antes de hablar, date un tiempo para disminuir tu coraje. Hazlo, distanciándote físicamente de la situación o la persona. Pero evita, durante ese tiempo, tener pensamientos que mantengan tu coraje. Lo ideal es hacer alguna actividad que te "obligue" a pensar en otra cosa. Aprovecha ese tiempo para trabajar en tu enojo, relajándote, leyendo un libro, oyendo música, dando un paseo, etc. 4.- Desarrolla tu empatía. Ser empático significa comprender a la otra persona, entenderla, ponerse en sus zapatos. Cuando realmente podemos hacerlo, contactando con sus necesidades, sentimientos y pensamientos, podemos entender la razón de su conducta. Esto no significa que tenemos que estar de acuerdo con esa persona, pero sentir y ver las cosas desde su punto de vista, nos ayuda a tener una perspectiva diferente y a eliminar el enojo. 5.- No personalices. No des por hecho que cuando alguien hace algo que te enoja o lastima, es con la intensión de causarte un daño a ti. En primer lugar no podemos adivinar el pensamiento y por lo tanto, la intención de la gente. En segundo lugar, no todo lo que sucede está relacionado con nosotros, aunque a veces es lo que pensamos. Pensar así es un error, que arrastramos de nuestra infancia y que nos hace sufrir innecesariamente. Si lo piensas, pregúntale a la persona involucrada, pero sin atacarla. Utilizando una comunicación adecuada. 6.- Lleva un diario. Cuando nos enojamos con frecuencia o cuando la gente lo piensa, es importante llevar un diario para darnos cuenta de: Qué tan frecuentemente nos enojamos, el nivel de nuestro coraje, la causa o causas principales, nuestra forma de pensar y cómo influye en alimentar nuestro coraje, identificar "los disparadores" de nuestro enojo, para evitarlo, desahogarnos. Anota cada vez que te enojas, los siguientes datos: El día y la hora y responde: 1. ¿Del 1 al 10, en donde 10 es mucho y 1 nada, cómo crees que calificarían los demás tu enojo? 2. ¿Cómo lo calificarías tú? 3. ¿Qué está sucediendo? 4. ¿Qué sucedió antes? 5. ¿Qué piensas de lo que sucede o de la persona que te provocó el enojo? Responde objetiva y detalladamente estas preguntas, cada vez que te enojes, para conocer la frecuencia e intensidad real, detectar qué tanto es un problema que te está afectando y cuáles son las causas. Elige algunas técnicas adecuadas, para solucionar el problema. 7.- Analiza el nivel de tu autoestima. Una de las principales causas de nuestro enojo, es una autoestima baja. Todos tenemos ciertas áreas con una buena autoestima y otras con una autoestima baja. Creemos, equivocadamente, que reconocer que nuestra autoestima es baja, indica que estamos mal, que somos personas de "segunda". Esto es un error. Lo único que indica, es que tuvimos un aprendizaje equivocado en algunos aspectos y que sería conveniente que lo trabajáramos, para sentirnos mejor y obtener mejores resultados en todo lo que hacemos.

Jesús Salva Y Sana 21.11.2022

¿Te preguntas cómo ser optimista? Ante una situación negativa, busca los aspectos positivos. Siempre los hay. Pregúntate, cómo puedes aumentarlos.... Analiza los aspectos negativos y separa los importantes de los que no lo son. No es igual no tener para comer, que no tener para comer en un restaurante o el pastel que me gusta. No es lo mismo, perder una relación por muerte, que por una discusión que podemos tratar de arreglar, cuando impedimos que nuestro falso orgullo intervenga. No te quedes atrapado en lo malo que está sucediendo o que crees que va a suceder. Enfócate en lo que si puedes hacer, para resolver o mejorar la situación. Acepta que las cosas no siempre van a ser como tú quieres, pero no por eso tienen que ser malas. No reacciones inmediatamente ante una situación. Haz un alto, analiza la situación y busca por lo menos, tres alternativas. Siempre las hay, no las descartes de antemano, guiado por tu pesimismo. Todos los días al despertarte y antes de dormir, piensa en algo bueno que tienes, que te sucedió o que hiciste. No tienen que ser grandes cosas. La vida diaria está formada por momentos y por la suma de una gran cantidad, de pequeñas situaciones. Cuando te quejes, te sientas víctima o con mala suerte, piensa en toda la gente que está mucho peor. Esto no significa conformarte, significa reconocer una realidad. La respuesta ante la pregunta de ¿Por qué a mí?, es ¿Por qué a ti no, si todo mundo tiene problemas y momentos de dolor? No permitas que pensamientos como: "yo soy así", "a mi edad ya no se puede cambiar", etc., te limiten. Siempre se puede cambiar, pero necesitamos esforzarnos para lograrlo. Si tú decides no hacerlo, estás decidiendo tener una vida menos satisfactoria. Reconoce tus errores y acepta que todos los cometemos. Las únicas personas que no se equivocan, son aquellas que nunca hacen nada. No te regañes por ellos, ni los utilices para comprobar, que a ti siempre te sale todo mal. Utiliza los errores para aprender de ellos. Piensa que las dificultades nos enseñan y fortalecen, preparándonos para enfrentar mejor, evitar o resolver futuros problemas. Lee y escucha a la gente que habla sobre motivación y optimismo. Pero recuerda que la información, es sólo el primer paso. Necesitamos cambiar nuestros pensamientos y conductas. Actúa, aunque te de miedo. Valiente no es aquel que nunca tiene miedo, ese es inconsciente. Valiente es el que actúa, a pesar del miedo. Juega, ríete y desarrolla tu sentido del humor. Aprende a reírte de ti mismo. Responde el cuestionario sobre optimismo, para ver en donde te encuentras respecto a esta actitud. Si tiendes a ser pesimista, contesta el cuestionario sobre autoestima, ya que una autoestima baja es determinante en nuestra manera de percibir y evaluar lo que nos sucede.

Jesús Salva Y Sana 20.11.2022

Tema: El comportamiento asertivo. Introducción. Descubre si eres asertivo o solo crees que lo eres. GALTATAS. 6.3 Porque si alguno se cree que es algo, no sien...do nada, se engaña a sí mismo. ¿Qué es el comportamiento asertivo? Es un tipo de habilidad social, es el comportamiento adecuado donde se puede expresar lo que se siente, piensa, cree o se necesita, sin ofender a los otros, abriendo posibilidades de diálogo y amistad con los demás. Principios básicos de la Asertividad Respeto por los demás y por uno mismo: Tratar a los otros con respeto es simplemente considerar sus derechos humanos básicos, que no es el tener condescendencia para no cuestionar lo que otros piensan o hacen. Principios básicos de la Asertividad Ser directo: Significa comunicar sentimientos, creencias y necesidades directamente y en forma clara. Principios básicos de la Asertividad Ser honesto: La honestidad significa expresar verdaderamente los sentimientos, opiniones o preferencias, sin menosprecio de los otros ni de sí mismo. Esto no significa decir todo lo que pasa por la mente o dar toda la información considerada como privada. Principios básicos de la Asertividad Ser apropiado: Toda comunicación, por definición involucra al menos dos personas y ocurre en un contexto particular, así una comunicación asertiva, necesita un espacio, un tiempo, un grado de firmeza, una frecuencia, etc. Derechos asertivos Considerar las propias necesidades Esto es un derecho y una responsabilidad, de lo contrario se corre el riesgo de no ser tomado en cuenta. La persona es quien pone los límites del abuso; cuando se autorespeta, los demás se ven en la necesidad de hacerlo. Cambiar de opinión: Todas las personas tienen derecho a cambiar de opinión, es recomendable no hacerlo constantemente, sin embargo las circunstancias pueden variar o el punto de vista al enriquecerse con más información. Derechos asertivos Cometer errores: Existe el derecho de cometer errores como todo ser humano, sin embargo, si no se aprende de los errores y se cometen una y otra vez, los demás tienen derecho a molestarse con tal persona. Ser tratado con respeto y dignidad: Nadie tiene derecho a ofender, menospreciar o ridiculizar a una persona aún en el caso de haber cometido errores. El tiene motivos para estar molestos con ella, no da derecho a faltarle al respeto, pues existen formas de comunicar asertivamente el mensaje. Derechos asertivos Rehusar peticiones sin sentirse culpable: Cada persona tiene sus necesidades y responsabilidades, y no existe la obligación de ceder a las peticiones de los demás. A veces en caso de querer hacerlo los propios compromisos no lo permiten, y no debe haber culpabilidad por rechazar peticiones. Pedir lo que se quiere: Todos los seres humanos tienen necesidades y el derecho a pedir lo necesitado, así sea información, ayuda, objetos. No debe confundirse el pedir con el exigir. Debe señalarse las necesidades en forma directa, clara, de buen modo y sin dar lugar a enojos o malos entendidos. Derechos asertivos Establecer las propias prioridades y tomar las propias decisiones: Existe el derecho a tomar decisiones por sí mismo, a valorar lo conveniente para sí mismo, a buscar las oportunidades y estímulos que se quieren. Calmarse, tomar tiempo y pensar: Las mejores decisiones se toman con tiempo. Las prisas llevan a tomar decisiones de las cuales es posible arrepentirse. Existen decisiones tan importantes que hay derecho a pedir tiempo para reflexionar. Derechos asertivos Obtener calidad: Tenemos el derecho de recibir lo comprado de calidad. Satisfacer las propias necesidades: Esto es más una obligación que un derecho. El mantenerse económicamente, satisfacer la alimentación, arreglo, vestido y transporte. Sin embargo pueden existir acuerdos de de cooperación, en el entendido que son obligaciones individuales y derechos que brindan independencia. Derechos asertivos Pedir reciprocidad: Cuando se da, hay derecho a pedir reciprocidad, no a exigir. Pues las personas no están obligadas a corresponder, el pedir a las personas la correspondencia por los sentimientos no hace ser interesado, sino sólo un ser humano que busca las condiciones ideales para relacionarse. No usar los derechos: La decisión de hacer uso o no de los derechos es sólo individual. Así como la responsabilidad de asumir las consecuencias de cualquier acto propio. Derechos asertivos La privacidad: Existe el derecho a estar solos, leer, reflexionar, oír música, escribir, o sólo pensar; este tiempo es indispensable para el crecimiento de cualquier ser humano, no se puede desligar de la cultura y el espacio real en el cual se convive. Sentirse bien consigo mismo: Todo ser humano debe luchar por sentirse bien, disfrutar los actos, el trabajo, valorar los logros, justificar los errores, así como desear ser mejores. Ventajas de ser asertivos Tener la capacidad de defender los propios derechos dando cabida a los intereses y derechos de otras personas. Ser honesto con sí mismo y con los demás. Poder de comunicar las opiniones de manera directa, sin dar lugar a malos entendidos. Ser auto-afirmativo sin sentirse culpable, ni perder el cariño de los demás. Poder de mantener amistades y conversaciones con familiares y amigos. Ser capaz de aceptar las propias limitaciones y aprovechamiento de sus capacidades individuales, conservando el respeto y la valoración por sí mismo. Comportamiento asertivo Implica firmeza para utilizar los derechos, expresar los pensamientos, sentimientos y creencias de un modo directo, honesto y apropiado y sin violar los derechos de otras personas. Comportamiento no asertivo Comportamiento Agresivo Se encuentran los componentes no verbales, y son los que dominan o intimidan a otras personas. Aquí se incluye un contacto visual que trata de hacer bajar la vista del otro y dominarlo, la voz esta fuera de lugar, se usa un tono sarcástico y los gestos corporales se caracterizan por un señalamiento constante con los dedos. Algunas creencias que promueven el comportamiento agresivo: Yo debo ganar para estar bien. Si no soy fuerte, no quiero ser escuchado. Comprometerse es perder. Debo imponer mi manera de hacer las cosas. Yo estoy bien y los demás no. Es posible que falte Asertividad: Si sientes que no vives de acuerdo a tus valores. Si ciertas situaciones te dejan frustrado, sintiéndote impotente o incapaz de ejercer control sobre tu ambiente. Si tienes tendencia a rumiar sobre las conversaciones y situaciones que ya pasaron. Si te sientes defraudado al final de un intercambio o conversación. Por otro lado, puedes estar siendo demasiado agresivo: Si con frecuencia sientes mucho coraje. Si te sientes culpable después de un intercambio o conversación. Si piensas en términos de ataque y defensa. Si con frecuencia te resistes a negociar. Barreras en la Asertividad: Las conductas que se manifiestan ahora, son repeticiones de conductas aprendidas en el pasado, Rechazo, traumas psicológicos, traumas físicos, todas estas cosas impide al ser humano ser asertivo. Características de la persona asertiva: 1. SE SIENTE LIBRE DE MANIFESTARSE COMO ES: ESTE SOY YO esto lo que yo siento, pienso y quiero. Características de la persona asertiva: 2. PUEDE COMUNICARSE CON LA GENTE DE CUALQUIER NIVEL, SIN SUFRIR LOS SENTIMIENTOS DE ANTISOCIAL. Con extraños, amigos y familia. Esta comunicación es siempre abierta, directa, sincera y apropiada. Características de la persona asertiva: 3. SE ORIENTA ACTIVAMENTE HACIA LA VIDA: Va detrás de lo que quiere. En contraste con la persona pasiva que espera que las cosas sucedan, hace que las cosas sucedan. Características de la persona asertiva: 4. ACTUA DE FORMA QUE SE RESPETA A SI MISMO: Acepta sus limitaciones conscientes de que no siempre puede ganar, sin embargo siempre se afana por hacer el bien de tal manera que gane, pierda o se retire, conserva su AUTOESTIMA, SIN SENTIRSE CULPABLE. Técnicas Asertivas: DISCO RAYADO: Ejemplo: Soy una persona capaz de hacer las cosas bien. Técnicas Asertivas: BANCO DE NIEBLA: Ejemplo: Tienes razón en que seria bueno aprovechar esta rebaja y comprar; yo te avisaré lo que decida. Técnicas Asertivas: ACEPTACIÓN NEGATIVA: Está técnica nos enseña a aceptar nuestros errores y faltas, (sin tener que excusarnos por ellos) mediante el reconocimiento decidido y comprensivo de las críticas que nos formulan a propósito de nuestras características negativas, reales o supuestas. Técnicas Asertivas: ACEPTACIÓN POSITIVA: Consiste en la aceptación asertiva de la alabanza que nos den (elogios, felicitaciones, etc.), pero sin desviarnos del tema central. Ejemplo: Es verdad, domino perfectamente esa herramienta, pero no voy a poder hacer el trabajo para mañana. Técnicas Asertivas: INTERROGACIÓN: Ejemplo: ¿Qué otras cosas te molestan?, ¿Qué hay de malo en decir: no sé hacer esto, o no me interesa esta propuesta?. Técnicas Asertivas: COMPROMISO: Puede ser muy asertivo y muy práctico siempre que no esté en juego el respeto que nos debemos a nosotros mismos, ofrecer a la otra parte algún compromiso. Ejemplo: Está bien, entrégame el trabajo el martes por la tarde en vez de el lunes a mediodía. Técnicas Asertivas: INFORMACIÓN GRATUITA: Consiste en escuchar activamente la información que nos dan los demás sin habérselas pedido nosotros y de allí partir para solicitar más datos y seguir la conversación. Las personas asertivas entablan conversación con facilidad, transmiten y recaban información sin problemas, dejan de sí mismas una agradable sensación, expresan con claridad sus puntos de vista, manifiestan su desacuerdo con los demás, valoran las opiniones de los otros. Ejercicio 2: 1. ¿Expresa generalmente lo que siente? 2. ¿Encuentra dificultades para la toma de decisiones? 3. ¿Tiene una actitud abierta a las opiniones, críticas e ideas de los demás? 4. ¿Protesta cuando alguien toma su lugar en la fila? 5. ¿Frecuentemente evita situaciones o gente por miedo a involucrarse? 6. ¿Cuándo un vendedor insiste, ¿le es difícil decir no aunque la mercancía no sea lo que realmente quiera? 7. ¿Se distrae si alguien mira su trabajo? 8. Si alguien patea su asiento en el cine ¿le dice que se detenga?. 9. ¿Tiene dificultades en mirar a los ojos de la gente con quien habla? Ejercicio 2: 10. En un buen restaurante, cuando algún alimento no está bien preparado ¿pide al mesero que corrija la situación? 11. Cuando descubre que la mercancía esta incompleta ¿regresa para reclamar? 12. ¿Muestra disgusto con palabras comunes o con obscenidades? 13. ¿Frecuentemente toma decisiones por otros? 14. ¿Es hábil para demostrar amor o afecto? 15. ¿Piensa que siempre tiene la respuesta correcta? 16. ¿Cuándo no coincide con otras personas respeta su opinión y habla sólo desde su punto de vista? 17. Si le molesta que alguien este fumando cerca de usted ¿lo dice?. 18. Con un extraño ¿Es el primero en empezar a conversar? ¿Eres asertivo o solo creáis que lo eras.



Información

Teléfono: +52 322 246 0080

Ubicación: Calle Vista Hermosa 48292 Puerto Vallarta, Jalisco, Mexico

179 personas le gusta esto

Recomendaciones y opiniones

Escribir una reseña




Ver también